Caída del cabello

Un problema común que se acentúa por estas fechas, justo acompañando la caída de la hoja propia del otoño y también del invierno.

Acecha a un montón de personas, es la conclusión que se extrae al echar un ojo a la estadística: el 52 % de los hombres admite padecerla, frente al 74% de las mujeres.
Siguiendo con los datos, conviene saber que tenemos alrededor de 100.000 cabellos y que cada día perdemos un promedio de 50 a 100.

Por encima de esta cifra, la caída es anormal y es ahí cuando debemos empezar a preocuparnos.

Cada pelo tiene una vida de 4 a 5 años, crece entre uno y dos centímetro al mes y después se cae.

En su lugar, nacerá un nuevo pelo, pero cuando existe calvicie no se produce este reemplazo.

Por lo tanto, no se trata sólo de la caída de pelo, sino más bien de la ausencia de crecimiento de uno nuevo.

Aunque la caída del cabello es especialmente común a partir de los 50 años, debido al proceso natural de envejecimiento, puede anticiparse por la acción de factores internos (genético u hormonal) o factores externos, como cambios de estación, estrés, contaminación, alimentación desequilibrada, etc.

De dos tipos
La caída del cabello puede ocurrir de forma progresiva y localizada, que tiene origen hormonal y/o hereditario y que mayoritariamente afecta a los hombres.

O la denominada reaccional o estacional, súbita o difusa, y que puede estar relacionada con varios factores, como el estrés, cansancio, embarazo u otros tratamientos médicos.

De todos modos, si el pelo se cae de forma rápida y sin causa aparente, hay que consultar con el médico que realizará una análisis general y hormonal, para saber cuáles pueden ser las causas.