El deporte perfecto para las piernas

Lo llevo probando dos meses en el gimnasio y los resultados están siendo magníficos. El aquabike es como el spinning, pero la bicicleta está dentro de una piscina en vez de estar en una sala.


En mi primera clase, la monitora me advirtió de que iba a ser bastante más difícil que fuerta, ya que la bicicleta tiene un par de resistencias en los pedales y eso sumado a la resistencia con el agua resulta más pesado. De todas maneras, acaba pareciendo menos porque estás más fresquita dentro del agua y no pasas tanto calor como en las salas, donde además pierdes muchos líquidos.

Además de rodar mucho, también se hacen muchos ejercicios para trabajar el resto del cuerpo, vamos, que no sólo se trabajan las piernas. Los 50 minutos que dura la clase se pasan volando, aunque no suele estar en todos los gimnasios. Si tenéis la ocasión de probarlo, ¡hacedlo!